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(Le dicen "amaneramiento"
a la poesía de autores como
Rubén Darío y Verlaine...
...pero cuán exquisito es!)

LAS INGENUAS

Somos las Ingenuas,
de mirada azul, con bandós lisos,
las que vivimos, casi desconocidas,
en esas novelas que se leen poco.

Vamos entrelazadas
y el día no es más puro
que el fondo de nuestros pensamientos,
y nuestros sueños son de azur;

corremos por los prados
y reímos y charlamos
desde los maitines hasta las vísperas
y cazamos mariposas;

los sombreros de pastora
defienden nuestra frescura,
y nuestros vestidos -tan ligeros-
son de extremada blancura;

los Richelieux, los Caussades
y los caballeros Faublas,
nos prodigan las miradas,
los saludos y los "¡ay!".

Pero en vano, pues sus mímicas
vienen a darse de narices
ante los plisados irónicos
de nuestras faldas descarriadas;

y nuestro candor se burla
de las imaginaciones
de esos rozadores de murallas,
pese a que sintamos a veces

batir nuestros corazones bajo los mantos
con pensamientos clandestinos,
sabiéndonos las amantes
futuras de unos libertinos.

Verlaine